Félix Ares, director del Kutxaespacio de San Sebastián, reflexionaba hace unos días en su bitácora que
«Intuyo que la coordinación ciudadana en torno al Chapapote, en muchas de sus facetas: voluntariado, organización de acciones, etc., no hubieran sido posible sin Internet. [...] La implicaciones de las Redes ciudadanas no soy capaz de preverlas, pero creo que muchas, muy grandes y de mucho alcance».
Y precisamente hoy en La Vanguardia, a un día de las manifestaciones organizadas a nivel mundial en contra de la guerra, se publica un artículo de Eulalia Solé que explora esta relación entre Internet y las redes ciudadanas. En Ya no son infalibles leemos:
«Este planeta globalmente tecnológico, que los más ricos consideraban feudo exclusivo, está produciendo una reciprocidad en la información capaz de desenmascarar las tretas de los mandatarios [...] La opinión pública ya no está informada unilateralmente. Además de a los gobernantes, escucha a los oponentes, los científicos, los intelectuales. Sabe que si Saddam tiene armas, basta con plantar la bandera de la ONU y obligarle a desarmarse. Los belicistas lo tienen difícil. Han dejado de ser infalibles»
No me extraña, por tanto, que el reportaje emitido en TVE1 sobre guerras químicas y biológicas obtuviera tan poca cuota de pantalla. E igual destino parece haber sufrido la entrevista que Aznar habría solicitado en Antena 3 TV. Según Periodista Digital, Aznar imploró cuatro veces que creyéramos en él, porque sí y ya está: «Pido a los españoles que me comprendan... Créanme, Sadam Husein está vinculado al terrorismo"». Quizás con el palestino, pero no con el de Al Qaeda. No es un peligro inminente ni global. Y me temo que su gobierno está vinculado con el terrorismo de estado que practica la Administración de Bush. Aznar, no es usted infalibe. Y como no le creo, yo ya he firmado mi carta de apoyo en Ante la Guerra, Actúa. ¿Y tú?
Pues no, no he firmado ni pienso hacerlo. Antes tendría que firmar en el sitio Sadam al tribunal internacional, pero parece que nadie se ha molestado en crearlo. Por cierto ¿cuántos muertos costaría NO hacer esta guerra?
¿Y uno en contra de la dictadura en Zimbabwe, que está llevando al país a la ruina, un país que era antes el granero del Sur de África? ¿Y a la guerra civil en Costa del Marfil?
Va haber que pedirle a los más americanos que decidan invadir cosas más a menudo, así la gente empezará a acordarse de ellas. Si los americanos no están en contra tuyo, ya puede morirse un millón de personas, que nadie va a hacer páginas web ni manifestarse a tu favor.
No sé porqué, este "no a la guerra" me suena siempre a "OTAN no, bases fuera"; o quizás será que una guerra no es guerra si no se meten los americanos. Todavía estoy esperando la manifa en contra de la matanza de hutus en Ruanda y Burundi.
Y ojo, no estoy diciendo que esté a favor de la guerra. Pero tampoco estoy a favor de los que están en contra de la guerra (al menos, de los más ruidosos).
Pongámoslo así: las guerras son malas porque muere gente y destruyen las cosas. Algunas guerras son menos malas porque evitan males mayores, pero eso no quiere decir que sean buenas. Esos hipotéticos males mayores deben estar sólidamente fundados.
Hay gente a la que no le importa que haya una guerra si obtiene algún beneficio. Esta gente es muy peligrosa porque intrigará, mentirá y engañará a otros para conseguir que haya una guerra.
Lo de Irak hoy no puede calificarse como "situación que irremisiblemente conduce a una guerra menos buena". Esto no tiene comparación con la anterior guerra del golfo, ni con la 2ª guerra mundial.
La gente tiene el derecho a cambiar de opinión, a cruzar el umbral de la indignación y a ejercer su democrático derecho a la protesta cuando, donde y como le parezca. No haber protestado antes no puede descalificar al que protesta ahora. Según esa ecuación nunca nadie podría protestar con legitimidad, ni siquiera Savater y sus admirables compañeros de Basta Ya.
Prácticamente toda la gente que hoy protesta por esta guerra ha pensado lo mismo de las guerras del pasado. Quienes fallaron entonces no fueron estos ciudadanos, sino los dirigentes que eligieron con la esperanza de que harían lo conveniente para fortalecer las instituciones internacionales que trabajan a favor de la paz. Yo no me siento culpable de la guerra de Bosnia o de la de Burundi, pero creo que entre los que en su día elegimos para gobernarnos muchos sí deberían sentirse culpables.
Si el Presidente del gobierno tiene información que le hace creer que la guerra es necesaria debe compartirla con nosotros. Es ridículo que nos pida fe y confianza cuando bastaría con los datos. No me importa que juegue a los secretitos del cuaderno azul con las cábalas sobre sus sucesores en el partido. Pero este es un tema serio. Si tiene pruebas, que las enseñe.
Hola, Vendell. Cosas que creo que hay que decir. Las razones que dan los EEUU para la guerra son falsas. No obstante, el historial de Sadam Huseín, sin necesidad de más pruebas, demuestra que este dictador genocida es un peligro para su propio pueblo y para la paz regional. Si eso basta o no para justificar una guerra, es una decisión personal de cada uno, pero de igual forma que los EEUU no deben contarnos milongas cuando lo que les interesa es participar del negocio del petróleo iraquí que nadie quiera tampoco venderme que si Huseín no tiene armas de destrucción masiva no es un peligro. La mayoría de los muertos que ha ocasionado lo han sido con armas convencionales.
Y en efecto, cada uno tiene todo el derecho a indignarse y protestar por lo que quiera, pero también tenemos derecho a cuestionar esa indignación y esa protesta porque si esta guerra puede ocasionar medio millón de muertos iraquíes, las sanciones económicas contra Irak causadas por las reiteradas vulneraciones de Sadam a las decisiones de la ONU han ocasionado ya medio millón de muertos y a nadie ha parecido importarles. El porqué medio millón de iraquíes ya muertos no ha indignado a nadie pero medio millón de iraquíes que quizás mueran sí, no deja de parecerme curioso. Y quien dice iraquíes puede decir hutus o de habitantes de Costa de Marfil.
José Luis: «...pero parece que nadie se ha molestado en crearlo». Pues si alguien lo hace, también lo firmaré. ¿Por qué no lo haces tú?
En el mismo sentido respondo a JJ. Que apoye esta guerra contra Sadam no significa que no pueda apoyar otras iniciativas, o que apoye a un partido o a una organización en concreto. Apoyo esta iniciativa. Punto.
Sencillamente, rvr, porque Sadam se limpiaría el c... con las firmas. Cada uno es muy libre de perder el tiempo como quiera y el iniciar actos de protesta inútiles no es algo que me atraiga (con todos mis respetos a quién sí quiera hacerlo).
No creo que esos actos de protesta sean inútiles, sino todo lo contrario: lo realmente inútil, además de ser la postura más cómoda, es la resignación y el pesimismo. Esto último sí que no ha servido nunca para absolutamente nada. Cuando la voluntad de protesta se desintegra, es uno mismo el que se desintegra. Me decía mi madre que para qué iba a ir a una manifestación, si ya estaba todo decidido. Y es que, aunque fuera así, no podemos callarnos. ¿No va a servir para nada? Pues no lo creo. Y protesto, he protestado y lo seguiré haciendo, con la misma vehemencia de siempre contra Sadames, Pinochets y Bushes. Y ahora, también, contra la guerra. No concibo el día en que pierda mi voz porque no va a servir para nada, ni el día en que me pasee por el mundo sin implicarme y sin la intención de querer cambiar las cosas; y estoy seguro que no es sólo un ensueño de juventud, como pensarán muchos.